Dropshipping: ¿Qué es? ¿Es una opción válida para mis envíos online?

El dropshipping ahorra una parte de la logística de envíos al fabricante, asumiendo sólo la parte de la venta de productos y la atención al cliente. No es una opción apta para cualquier negocio, pero puede suponer muchas ventajas. En este post lo explicamos.

Márketing Legro

Última modificación: 10 noviembre 2021

Quienes hayan llegado a este post buscando qué es el dropshipping, habrán visto en alguna parte que tiene que ver con la logística de pedidos online, y quizá se hayan planteado si es una buena alternativa para el suyo, y qué diferencias presenta con otras. Como proveedores de soluciones de embalaje para todo tipo de almacenes, en Legro conocemos en profundidad este tipo de negocio y queremos profundizar en él para que quienes lo estén valorando tengan la información necesaria.

¿Qué es el dropshipping?

Imaginemos que nos disponemos a vender patinetes online, tengamos o no una tienda donde los vendamos también físicamente. Deberemos encargar una cantidad determinada al fabricante, generalmente incluyendo diferentes modelos, que nos los enviará a un almacén propio o subcontratado a través de soluciones como el fulfillment, del que hablamos en este post. Esta opción requerirá el pago convenido por el pedido al fabricante, que tendrá un volumen de pedido mínimo, y probablemente pagar aparte a la empresa de transporte (aunque hay fabricantes que ofrecen la opción de envío subcontratándola por su cuenta), y el pago del almacén en la modalidad que sea, además de unos tiempos de fabricación y de entrega determinados.

El dropshipping ahorra una parte de ese proceso, y por lo tanto una parte de la inversión que implica. Consiste en la venta de productos del catálogo del vendedor que los ofrece generalmente online, a través de su web, sin disponer de stock. Son los mayoristas, proveedores o fabricantes quienes se encargan de fabricar, almacenar, empaquetar y enviar ese stock a los clientes, mientras que el vendedor se ocupa de poner los productos a la venta, captar clientes y fidelizarlos,es decir, que no ve ni manipula el producto.

que es el dropshipping

De esta manera, para empezar, no requiere invertir en la fabricación, envío y almacenaje de un stock que después tal vez no se venda. Por otro lado, reduce tiempos, al no tener que esperar a que esté fabricado todo el stock para hacer el envío. Estos tiempos son considerables si se trata de fabricantes situados en China u otros países del sudeste asiático, sobre todo cuando se hacen por barco para que sean lo más económicos posible.

¿Quién usa el dropshipping?

Se estima que un tercio del comercio electrónico utiliza el dropshipping como un modelo de negocio para la gestión de inventarios. Está proporción se debe principalmente a que gigantes de la industria como Amazon, AliExpress o Sears lo usan desde hace mucho tiempo. Todos aquellos productos cuyo tiempo de entrega suele ser de quince días a un mes, por ejemplo, acostumbran a ser gestionados por medio de dropshipping desde China.

Sin embargo, también hay empresas más pequeñas que optan por el dropshipping como una solución inicial o transitoria (por ejemplo, para introducir un nuevo producto en el mercado) en la gestión de inventario sin el riesgo que supone el adquirir y vender stock físico. Como veremos a continuación, el margen de beneficio es inferior, pero ayuda a hacerse una idea de la aceptación del producto en el mercado para más adelante, si es preciso, recurrir a la logística de envíos propia o mediante una empresa de fulfillment.

Ventajas de recurrir al dropshipping

Requiere menos capital

La mayor ventaja del dropshipping (y seguramente la más importante) es que a diferencia de un sistema logístico con stock físico hay menor riesgo de pérdidas económicas ya que la inversión que debe asumirse es mínima: se crea la tienda online, se planifica la estrategia de márketing, etc. No conlleva inversión de almacenaje, ni de personal para preparar pedidos y atender al cliente para envíos y devoluciones, ni pedidos mínimos al fabricante. El vendedor compra el producto sólo cuando lo ha vendido.

El stock (casi) nunca se acaba

Salvo incidencias con el proveedor, un negocio que recurre al dropshipping nunca perderá una venta por falta de stock, como ocurre a menudo con negocios con otros modelos logísticos. Además, muchos vendedores cuentan con acuerdos con varios proveedores de dropshipping para asegurarse de tener siempre reemplazo.

Facilidad de ofrecer productos más variados

Como hemos explicado al principio, para ofrecer el reclamo de un producto en varios modelos (colores, medidas, etc.), un vendedor que recurre a logística propia o subcontratada debe hacer una mayor inversión para disponer de stock en todas esas variedades para poderlo ofrecer a sus clientes, a riesgo de que unas variedades se vendan más que otras y éstas últimas queden obsoletas en almacén. Con el modelo de dropshipping es posible ofrecer una gran variedad de productos sin invertir ni un euro más.

Podemos ubicar el negocio donde queramos

Un negocio basado en el dropshipping permite operar desde cualquier lugar del mundo. Solo hace falta un ecommerce, una buena conexión a internet y proveedores fiables que faciliten toda la información que el cliente final necesite sobre los productos y ofrezca una buena atención para incidencias y devoluciones.

Inconvenientes del dropshipping

Errores por parte de los proveedores

Aunque gran parte del proceso esté en manos del mayorista, proveedor o fabricante, quien da la cara por el producto y la atención al cliente es el vendedor, que no tiene control sobre ellos. Por eso un error del dropshipper puede resultar mucho más perjudicial para el vendedor que sus propios errores.

Además, hay que recordar que los dropshippers no siempre se hacen cargo de asumir los costes de un producto defectuoso aunque sea por culpa suya, y a menudo el vendedor tiene que hacer de nuevo el pedido a su cargo para mantener satisfecho al cliente. Debemos tener presente que en venta online pueden llegar a devolverse un 25% de los productos, por diversos motivos.

Competencia, competencia y competencia

El negocio del dropshipping tiene cada vez más competencia, por lo que es más que probable que estemos compitiendo con más vendedores que ofrecen los mismos productos y los encargan a los mismos proveedores. Es más, a veces los dropshippers también venden directamente al cliente final, resultando otro competidor, especialmente en el caso de proveedores del sudeste asiático.

Esto obliga a bajar precios (cuando el margen de beneficio, al ocuparse el proveedor de gran parte del proceso, ya es de inicio menor que con otros modelos porque los buenos precios se obtienen con grandes pedidos y no con la compra a demanda), así como a buscar estrategias de comercialización que diferencien el negocio más allá de un producto que termina siendo igual, y con un envío y una atención al cliente externalizados es complicado buscar ese toque diferencial.

El control del inventario es complicado

Si bien es cierto que los dropshippers tienen como punto fuerte la disponibilidad de stock, esto no se puede garantizar al 100%, por lo que es posible que si hay un aumento repentino de la demanda (aunque no provenga de nuestro negocio), y el proveedor no actualiza su sistema a tiempo, podamos estar vendiendo un producto que está agotado sin saberlo, y asumir el coste de imagen que eso supone ante los clientes.

Compleja logística de envíos

Si nuestra empresa trabaja con más de un proveedor (que es lo más normal para no depender de las condiciones de uno solo), la logística de su sistema informático es más compleja y dependiente de un equipo de desarrollo informático.

Sin embargo hay plataformas de venta online que ya incorporan la interfaz de venta para la web y servicio de dropshipping, como Shopify.

¿Es el dropshipping adecuado en nuestro caso?

Hemos visto ventajas y desventajas del dropshipping, y ejemplos de tipos de negocio que los usan. Hoy en día una buena alternativa para negocios que venden online es incorporarlo como complemento, para abrirse mercado con nuevos productos corriendo de inicio los mínimos riesgos, mientras recurrimos a sistemas tradicionales (compra de inventario y procesamiento y envío a cargo propio o subcontratando una empresa de fulfillment) para todo lo demás.

La experiencia de Legro para la gestión de stock

Si optamos por gestionar nuestro propio stock, Legro puede ayudarnos a hacerlo de forma más eficiente, reduciendo costes, seamos un pequeño negocio o una multinacional, gracias a sus soluciones de preparación de pedidos a medida, con mesas de embalaje modulares, carros de picking, expendedores y consumibles de embalaje (relleno de cartón, papel burbuja, cinta adhesiva, papel film…) y mucho más.