Embalaje para ecommerce: 6 preguntas frecuentes respondidas

El embalaje para ecommerce debe proteger el producto, ofrecer la mejor experiencia de marca posible y ofrecer una buena calidad precio, entre otros. Pero ¿en qué momento de nuestro plan de negocio empezar a pensar en el embalaje? ¿Qué tipo debemos usar? Respondemos a estas y más preguntas.

Embalaje para ecommerce

Márketing Legro

Última modificación: 3 enero 2024

Si tenemos un ecommerce, debemos tener en cuenta el embalaje que adoptaremos desde prácticamente el principio de la estrategia comercial: no es algo accesorio, una ocurrencia de última hora, sino parte de la oferta del producto que afecta a la experiencia del usuario y a la imagen de marca, y por lo tanto al éxito de nuestro negocio. Y precisamente por este papel crucial del embalaje en un ecommerce, a quienes son conscientes de su importancia les surgen muchas dudas. En este post intentamos responder a las preguntas más frecuentes sobre el embalaje para ecommerce.

1. ¿Cuándo tenemos que empezar a pensar en el embalaje para nuestro ecommerce?

Como hemos explicado, el embalaje es parte integral de nuestro mismo producto: un producto bueno embalado de forma insatisfactoria puede generar una percepción de baja calidad o de dejadez de la marca con respecto a la estética o a la integridad de sus productos, por ejemplo. Por eso, el embalaje para ecommerce estará presente en las diferentes etapas es esta estrategia comercial:

Conceptualización del producto

Cuando definimos el producto a comercializar, su público objetivo (sus intereses, su perfil sociodemográfico, etc.) y lo que queremos transmitir como marca, ya debemos empezar a planificar qué embalaje estará alineado con ello, como los materiales, el mensaje, etc.

Diseño de producto

En esta fase se determinan mejor las necesidades del producto en cuanto a dimensiones, fragilidad, diseño, etc., y se pueden considerar soluciones de embalaje para nuestro producto más concretas.

Plan de negocio

Cuando tenemos más o menos claro qué packaging podemos necesitar, tendremos que pedir diferentes presupuestos e incluirlos en el plan de negocio.

Selección del proveedor

De acuerdo con el presupuesto y los requisitos (no sólo físicos, sino de calidad, impacto medioambiental, etc.) de nuestro packaging deberemos seleccionar un proveedor que se adapte a ellos, pedirle muestras, etc.

Márketing y branding

Una vez hemos elegido el proveedor, debemos pedir una pequeña tirada de embalajes con nuestra imagen de marca para evaluar si es como lo habíamos conceptualizado.

Pruebas de embalaje

Antes del lanzamiento del producto es importante enviarlo en el packaging elegido, que habrá fabricado el proveedor en una tirada pequeña, a personas de confianza para que lo valoren, e incluso enviárnoslo a nosotros mismos para ponernos en la piel del cliente cuando lo reciba.

El papel de la empresa de logística: es importante tener en cuenta que hay una parte del embalaje, la más externa (la que protege el paquete de golpes durante el trayecto y permite su apilamiento) que también tiene incidencia en la percepción del cliente y no depende de nuestro proveedor de embalaje de producto ni de nosotros directamente, sino de la compañía de reparto y/o de logística. Por eso debemos informarnos de cómo trabaja, su puntualidad, su calidad, su compromiso con la sostenibilidad, etc., para verificar que se alinea lo máximo posible con nuestra marca.

Lanzamiento

Las primeras impresiones de los clientes son las más valiosas, porque se basan en su experiencia con otras marcas y no en las opiniones ya expresadas sobre nuestra marca por parte de otros clientes.

Mejora continua

No debemos tener miedo al cambio a medida que las necesidades de nuestro negocio y de nuestros productos cambian, siempre guiados por el feedback de nuestros clientes.

2. ¿Cuál es el mejor embalaje para ecommerce?

Como podremos imaginar, existen infinitas opciones de embalaje para ecommerce según el tipo de producto, dimensiones, peso, conciencia medioambiental, imagen de marca, etc., como papel, cartón, aluminio, cristal, corcho, tela, etc., en forma de cajas, sobres, bolsas, estuches y mucho más. En este post hablamos de los tipos de embalaje.

Lo que es una evidencia es que las cajas de cartón de diferentes tamaños, formas y materiales son una de las opciones más comunes por su calidad-precio, su durabilidad, su facilidad de reciclaje, etc., mientras que productos muy concretos pueden optar por otros tipos de embalaje: las joyas y los relojes pueden ir en estuches de aluminio que les brindan sensación de lujo, las bebidas como los vinos pueden ir en estuches de corcho que les proporcionan una imagen natural y protección contra golpes, los productos artesanales pueden ir en bolsas de tela, etc.

¿Cajas o sobres?

Las cajas de cartón son muy habituales en una gran cantidad de productos por su versatilidad, su resistencia a grandes pesos y su amortiguación contra golpes, etc. Existen infinidad de opciones: cajas automontables, en forma de estuche, con tratamientos antihumedad, etc.

Los sobres son ideales para objetos poco pesados, generalmente planos y no frágiles, como artículos de papelería, ropa, ciertas joyas, etc., pesan menos y ocupan mucho menos espacio, por lo que reducen costes de almacenaje y de envío. El caso de los plásticos todavía se reserva a productos que podrían deteriorarse por la humedad y otros factores ambientales.

Hoy en día hay un híbrido entre cajas y sobres que son los sobres rígidos de cartón como los que usa Amazon, que ofrecenuna mayor resistencia a golpes, rasguños y dobleces que los sobres convencionales, y que se pueden abrir fácilmente con un rasgado.

¿Qué tipo de relleno usar?

Como explicamos en nuestro post sobre este tema, el relleno para embalaje es fundamental, no solo en productos frágiles. Existen las clásicas opciones como el plástico de burbujas o los “cacahuetes” de poliestireno, u otras, cada vez más utilizadas, más sostenibles, como el cartón a jirones o los cojinetes de bioplásticos.

3. ¿Debo personalizar el embalaje de mi ecommerce?

Un embalaje personalizado genera una conexión con el cliente que impactará positivamente en su experiencia de compra y reforzará la imagen de marca, como apuntábamos en este post. Personalizar un embalaje no significa que cada persona tenga un embalaje distinto, sino hacer que se sienta especial, no un simple “número de pedido”, y eso puede lograrse con un pequeño regalo, una nota, un papel tisú o la propuesta de un juego. Sin embargo, si el presupuesto es muy limitado, los productos que se venden son de gran tamaño o el envío es urgente, entre otros, puede no ser conveniente un embalaje para ecommerce personalizado.

4. ¿Debo optar por un embalaje para ecommerce que sea sostenible?

En nuestro post sobre packaging sostenible explicábamos que tanto el consumidor como la administración se han vuelto más exigentes con las medidas que exigen a las empresas para que sean más sostenibles, y de hecho existe una reciente normativa europea al respecto. Es, entonces, importante para un negocio online tener en cuenta la sostenibilidad de su embalaje. No sobreembalar, evitar los embalajes de un solo uso en la medida de lo posible, optar por materiales biodegradables o, por lo menos, reciclables, elegir diseños de embalaje fáciles de separar, etc., son algunas de las estrategias que se pueden seguir.

5. ¿Cómo afectan las devoluciones al embalaje para ecommerce?

Por normativa, la mayoría de productos que se venden por internet tienen que poderse devolver, ya que el usuario no tiene la oportunidad de verlos y probarlos como lo haría en una tienda, por eso un ecommerce deberá tener preparada una estrategia de devoluciones, en la que el embalaje es importante, porque

6. ¿Cómo puedo procurar un proceso de embalaje para ecommerce rápido, ergonómico y económico?

A menudo ocurre que los negocios de ecommerce no adoptan desde el principio un proceso de embalaje adecuado a sus necesidades, por simples que sean. Eso puede, en momentos de mucha demanda, generar cuellos de botella, aumentando los tiempos de entrega (y por lo tanto, arriesgando la satisfacción del cliente) y los costes laborales y de material.

Aunque nuestro negocio sea pequeño, debe contar con una estación de embalaje bien organizada y ergonómica, donde todos los materiales que necesitemos estén al alcance de la mano y a una altura adecuada, minimizando los movimientos necesarios para el embalaje. Además, es importante disponer de materiales de embalaje lo más estandarizados y versátiles posible para facilitar la selección y reducir los costes de inventario. Herramientas como dispensadores de cinta, máquinas de corte, sistemas de relleno automático, etc. hacen el proceso más ágil. Todo ello puede estar integrado en un banco de trabajo como los que ofrecemos en Legro, adaptado al 100% a las necesidades de cada empresa.

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